"Aun a riesgo de parecer reiterativos, una vez más nos preguntamos si en esta ciudad existe de verdad afición al rock-a la música en general-o somos cuatro gatos. Podríamos pecar de ingenuos y suponer que el jueves por la noche los aficionados prefirieron quedarse en casa leyendo a Saramago o viendo ´Saturday Night Live´ en vez de asistir al concierto de You Am I, pero es que la situación-la escasísima afluencia de público-se repite semana tras semana.
Este párrafo está extraido de la crónica que Gonzalo de la Figuera publicó el sábado en Heraldo de Aragón referente al concierto que la banda australiana You Am I dio en la Casa del Loco el jueves ante...sesenta personas. Mientras leía la crónica veía el lamento de tantos a los que nos gusta la música: la peña pasa de ver conciertos en directo, salvo los de las grandes estrellas. Y los motivos podrían ser varios.
El primero que se me ocurre es que a día de hoy el rock y derivados no forman parte de las preferencias musicales de la mayor parte de los jóvenes porque gracias a las radios fórmula y determinados programas de televisión lo que prima hoy en día es la melodía moñas, el/la guaperas de triunfo fácil y el rollo latino de camisa abierta tachún-tachún, mueve tus caderas. Ello provoca que muchos jóvenes sólo quieran escuchar aquello que conocen, nada más, independientemente de que el artista en cuestión sea un zote y que tenga menos voz que el muñeco Rockefeller, pero no quieren explorar, no quieren mover el dial y buscar otras emisoras y otras músicas.
De ello deriva el segundo motivo. Los que tenemos que mantener la fé, la llama encendida, la bandera en todo lo alto, es decir, los que nos gusta el rock (cada uno en nuestra parcela: rockers, mods, heavies, punks...etc.) somos un poco más mayores-sin negar que haya chavales que abracen la buena música-y por lo tanto curramos, o sea, que ir un jueves a un concierto puede provocar pereza a más de uno debido a que el día siguiente hay que trabajar.
Y el tercer motivo es la pasta. Una de las excusas preferidas hoy día es el tema de pagar entrada, porque a todo Cristo le parece caro un concierto. Si son cinco euros, mala cara porque mira tú que rancios los del garito. Si son 10 euros, morro torcido porque hay que ver, si a los del grupo no los conocen ni en su casa...y así. Pero es que hay unas cuestiones dignas de pensar, damas y caballeros...¿porqué los grupos tienen que tocar gratis? ¿es que su trabajo no merece ser recompensado? ¿cuánto dinero os dejáis en cubatas u otros vicios durante el fin de semana?
No digo que el rock esté en extinción, pero sí pienso que está seriamente dañado porque mucha gente le dado la espalda y en España en concreto se la ha dado la juventud, precísamente la piedra angular del rock: la juventud. Y el concierto en directo en un bar, pub o pequeña sala es la sangre del rock.
En abril en Zaragoza los mods estamos de enhorabuena porque tenemos nuestra concentración particular, pero debería de estar contenta mucha gente más porque en tres días actuarán cinco grupos: cuatro de Zaragoza y uno de Barcelona que dejarán sobre el escenario gotas de rhythm&blues, punk, garage, soul y funk. ¿Asistiremos? ¿Seremos capaces de premiar el esfuerzo pagando una entrada, aun a costa de bebernos un cubata menos?
4 comentarios:
Lo que es una realidad es la escasa afluencia a los conciertos, quitando claro los promocionados por los 40 criminales, las bebidas de refrescos y demás morralla comercial. El caso es que entre la gente más joven (incluso de la escena) parece que prima más la cultura del DJ que la de los directos. Ya me hubiera gustado a mi encontrarme por lo menos a 60 personas en muchos de los conciertos a los que he ido ultimamente. Saludos
Pues mira, acabas de citar algo que olvidé mencionar: "El caso es que entre la gente más joven (incluso de la escena) parece que prima más la cultura del DJ que la de los directos". Triste pero cierto; si ya de por sí somos una escena minoritaria (y que siga así)flaco favor nos hacemos si no acudimos a los directos. Y francamente, más de un "pincha" se lo debería hacer mirar, con ésa manía de pinchar el sencillo más caro o el más oscuro, en lugar de preocuparse de que la gente baile.
Yo hablo desde el lado del escenario, que razón hay en todo lo que decis, pensar por un momento en las ganas de un músico que está tocando lo que el ha escrito o sentido con toda su mejor intención y ver que en la sala hay 15 o 20 personas, que a su vez no se atreven de arrimarse a la primera fila para dar calor a la banda, con que ganas va a tocar el grupo??, hablo bajo mi corta experiencia, ha habido momentos muy buenos en cuanto a gente se refiere, pero los momentos amargos de los que hablamos han sido bastantes más, aun así, compensa, pero ¿quien dice que un día nos cansamos de todo esto y lo mandamos a la mierda?, así si que se acabaría la cosa, menos mal que aun hay gente que creo en el amor al arte.
Salud y "música" para todos
Nada de mandar a la mierda, la actitud ante todo!
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