Música y scooters, he aquí varias fotos de cuestionable
calidad (es lo que tiene el nuevo estilo de vida Smartphone) para dar fe de dos
hechos: el concierto de Ocean Colour Scene del pasado dos de diciembre y la salida
del Flamingo Scooter Club de ayer domingo.
Del concierto de los ingleses, sólo puedo decir una palabra:
excelente. No tuve oportunidad de verlos en sus anteriores actuaciones en
Zaragoza, así que esta vez no me los podía perder. Y mereció la pena, vaya que
sí. Qué gozada es poder escuchar durante casi dos horas a una banda de rock
como OCS, con un sonido en directo sin fisuras, redondo, y con un Steve Cradock
sublime a la guitarra.
Y de ayer, qué decir de ayer. El Flamingo SC resurgió de sus
cenizas y consiguió reunir a ocho intrépidos escuteristas (ocho!!!) que
desafiaron el frio y la niebla para atacar su presa favorita: el almuerzo en
Los Caracoles. Manda huevos, que diría aquel, que seamos incapaces de juntarnos
a lo largo del año, cuando hace un clima más benigno, y en cambio lo hagamos en
pleno diciembre de niebla zaragozana. Pero así somos, somos el Flamingo Scooter
Club, desde 1.999.
